La Rioja es, en España, conocida como la tierra del vino. La gran calidad de sus productos, y la mezcla de modernidad y tradición en sus procesos de elaboración, hacen de sus caldos, algo realmente excepcional para el paladar.
Alrededor de la “Cultura del vino” se ha desarrollado el concepto de “Enoturismo”, con una amplísima oferta de palacetes rehabilitados convertidos en hospederías rurales y visitas a bodegas desde las más tradicionales a las más modernas.
En los últimos años se ha consolidado un auge del sector que lo ha puesto a la cabeza a nivel mundial, a ellos ha contribuido la edificación de edificios destinados a bodegas, realmente espectaculares. Este maridaje entre arquitectura y paladar, hace de las rutas del vino de La Rioja, una oportunidad única de conocer algo más de esta hermosa tierra, llena de historia.
El edificio más espectacular es sin duda el diseñado por Frank Gehry para las Bodegas Marqués de Riscal, en la localidad de Elciego. Se trata de un complejo formado por tres edificios, diseñados con las características del estilo Gehry, que podemos apreciar, por ejemplo en el Guggenheim de Bilbao. Incluye un hotel de lujo, un balneario con tratamientos especiales a base de uva y un restaurante.
Hay unos cuantos edificios más que han merecido galardones de arquitectura, como las Bodegas Campo Viejo o las Bodegas Regalía Ollauri, o las Bodegas López de Heredia Viña Tondonia, que incluso cuentan con una exclusiva boutique con botellas diseñadas por la Premio Pritzker, Zaha Hadid.
Pero por poner un contrapunto mencionaremos el extremo opuesto, las Bodegas Castillo de Cuzcurrita, emplazadas en un castillo palacio medieval rehabilitado en la localidad de Cuzcurrita del Tirón. En el año 1999 el Castillo pasó a manos de su actual propietario, la empresa Bergé y Cia., que desde su adquisición iniciaron una remodelación integral de las instalaciones para adaptarlas a su nueva funcionalidad como bodega de excepción. La rehabilitación, además de estética, respetando la arquitectura del edificio, se ha hecho extensiva a la modernización de las técnicas de elaboración de los caldos.
Como veis, hay para todos los gustos, pero eso sí, con buen paladar.
Marga G.-Chas Ocaña
