El puente de los Dragones, ubicado en la ciudad eslovena de Liubliana, es una de los principales construcciones de este tipo que podemos encontrar tanto en la localidad, como en el resto de Europa. De hecho, se trata de una estructura que tiene una historia previa a ella misma, ya que fue construida sobre el antiguo puente del mismo nombre, que fuera destruido por un terremoto en el año 1895.
Este sitio de paso, que fuera pensado directamente para el paso de vehículos y no de personas, aunque los turistas intentan acercarse lo más posible al mismo siempre que pueden, ha sido desarrollado concretamente para poder atravesar el río Ljubljanica, el más importante a nivel local, y se encuentra en el mismo espacio donde incluso antes del primer puente de los Dragones, se ubicada el denominado “Puente de los Carniceros”.
En cuanto al nombre de este puente, en tanto, se debe señalar que el mismo está relacionado con un antiguo mito de los residentes locales, los cuales sostenían que uno de los héroes nacionales, Jasón, junto a los argonautas, debió matar en cierta oportunidad a un dragón para salvar una virgen que estaba secuestrada por el mismo.
Más allá de todo esto, a nivel actual podemos decir que este puente se considerado por los especialistas arquitectónicos, como una de las mejores construcciones y muestras, a nivel mundial, del Art Noeveau, motivo por el cual el gobierno de Eslovenia lo protege mediante la denominación de “Monumento Turístico”.
A nivel histórico, en tanto, se debe destacar que el puente de los Dragones se convirtió, en su momento, en uno de los primeros hechos con hormigón en todo el mundo, y desde luego siendo el pionero en la ciudad de Liubliana. Cuenta con unos 33 metros de diámetro, y al momento de su inauguración, a comienzos del siglo pasado, contaba con el tercer arco más grande del mundo.