Si bien son varios los países que integran la península balcánica, la similitud de sus paisajes -todos magníficos- que les brinda la cadena montañosa de los Balcanes y su relación con el mar, así como los rasgos culturales e históricos que muchos de sus pueblos comparten, hacen que podamos catalogar a los Balcanes como un destino turístico lleno de encanto y aventura, donde la principal modalidad de vacaciones resulta una mezcla del turismo cultural, con el turismo aventura, pues si bien existen polos muy desarrollados, también los hay muy poco visitados y llenos de autenticidad, como alguno de los destinos que veremos a continuación.
Ohrid – Macedonia
Encaramada sobre un peñasco a la orilla del lago homónimo, la localidad macedonia de Ohrid se considerada de los sitios europeos más antiguos en ser poblados, por lo que tras años y años de civilización, esta zona ha ido adquiriendo un valor histórico y cultural tan importante que le validaron la catalogación como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, siendo hoy en día un bonito destino para visitar tranquilamente, y disfrutar de sus estupendos paisajes y de la cultura local.
Monasterio de Rila – Bulgaria
En primer lugar, el magnifico escenario de montañas boscosas que lo rodean, y el incalculable valor histórico y cultural que se desprende de sus centenarias construcciones de estilo bizantino, explican a la perfección el hecho de que el Monasterio de Rila sea uno de los puntos más visitados de Bulgaria, pues además de ser un buen ejemplo de la cultura ortodoxa, constituye todo un símbolo de la historia búlgara.
Monasterios de Meteora – Grecia
Y si hablábamos de los Balcanes, no podíamos dejar de mencionar a Grecia, país que ocupa el extremo de la península, y donde se encuentran lugares tan fantásticos como los monasterios de Meteora, un conjunto de construcciones monacales ortodoxas ubicadas prácticamente que en inaccesibles montañas, integrando un espacio declarado Patrimonio de la Humanidad, y que verdaderamente causa asombro.
