Cada tres años, 70 millones de personas se reunen en la mayor celebración hinduista, escasamente conocida por los occidentales. Para experimentar la magia del mayor festival hindú del mundo, el único que puede verse desde el espacio.. El festival está inspirado por una antigua historia: en la era védica demonios y semidioses lucharon durante 12 años por hacerse con el néctar de la inmortalidad.
En el fragor de la batalla cayeron algunas gotas de néctar desde el cielo a los actuales pueblos de Haridwar, Nashik, Prayag y Ujjain (el Kumbha Mela se turna entre estos pueblos). El acto principal es un baño ritual en el río que simboliza la limpieza de los pecados, mientras elefantes, caballos, camellos y carrozas doradas circulan por calles llenas de músicos, bailarines en trance y multitud de espectadores intimidados.
La mejor época para ir es desde marzo a abril, en el 2010 el baño sagrado se realizará el 14 de abril. Haridwar está a cuatro horas en tren de Nueva Delhi. Una alternativa es alojarse el el lujoso resort Ananda, a una hora de coche por la cima del Himalaya. (Habitaciones desde 225 euros)