Cuando la Ruta del Vino Cigales acaba de cumplir cinco años, con un crecimiento del 50% en el número de visitantes en los dos últimos, los nuevos proyectos e iniciativas se acumulan para hacer aún más interesante este recorrido. Entre esas novedades, destaca la promoción de los “Castillos del Vino”, con la inauguración de dos espléndidos ejemplos vinculados al enoturismo. “Se trata –indica Miguel Ángel García Velasco, gerente de la Ruta del Vino Cigales– de un fantástico museo en Fuensaldaña referente de los Castillos de Valladolid, provincia con más castillos en toda España, entre ellos algunos tan espectaculares como el de la Mota, Peñafiel o Portillo…, con visión nacional e internacional donde poder conocer el vino de la Corte, que se elaboraba en la actual Ruta del Vino Cigales, especialmente hasta el siglo XVI, cuando la Corte se encontraba en Valladolid y las bodegas de la zona de Cigales abastecían sin pagar impuestos el vino a la ciudad de Valladolid.”
También se acaba de inaugurar el Castillo Encantado de Trigueros del Valle con la aportación de Juan Villa, creador del atrezzo de “Cuarto Milenio” e ideólogo del castillo. Un espacio para disfrutar. “¿Te imaginas –añade Miguel Ángel– un auténtico castillo del siglo XV habitado por seres encantados, mitológicos, algún que otro extraterrestre o ser terrorífico? Juan Villa creador de efectos especiales y decorados para cine y televisión nos ofrecerá una transformación completa del lugar para que el visitante, guiado por unos peculiares inquilinos, descubra una historia que entremezcla realidad y fantasía. Un lugar para disfrutar en familia. Los más pequeños soñarán y se divertirán con estas creaciones mientras que los mayores podrán disfrutar de una ambientación completa con la que llevarse algún ligero susto. Curiosamente, el Castillo Encantado aloja en su interior el lagar más antiguo documentado en la Ruta del Vino.”
Pero junto a las novedades que mes tras mes se van incorporando a la Ruta, se mantienen y potencian sus atractivos de siempre. “Nuestra seña de identidad –indica el gerente de la Ruta– son las bodegas tradicionales, muchas de ellas subterráneas, y además disponemos de un espléndido Museo del Vino en Mucientes, así como la Bodega Tradicional Cigales. Junto a ellos se encuentran las Casas-Cuevas, originales estructuras donde vivían las familias con menos recursos y que se puede visitar una en Dueñas de forma intacta mientras que en Trigueros del Valle se va a realizar la segunda fase del Centro de Interpretación. También el Aula de las Abejas del Cerrato, un referente para conocer estos increíbles insectos. Y para disfrutar la naturaleza nada como los «Seis ochocientos», un programa que está organizando la Oficina de Turismo de Valoria la Buena para conocer los seis picos de más de ochocientos metros que tiene el municipio. Junto a ello, Los Monasterios de Santa María de Palazuelos y el de San Isidro de Dueñas, con la influencia Císter y que muestran la importancia del clero en el territorio.”
Todo el territorio por el que discurre la Ruta del Cigales es especialmente atractivo para los amantes de la naturaleza. Se ha creado una Red de Senderos que en muchos casos, curiosamente tratándose de una ruta del vino, tiene al agua como protagonista, ya que el Pisuerga con sus impresionantes cortados la recorre en buena parte y también el Canal de Castilla discurre por más de 200 kilómetros dentro de la Ruta. Además, está el Canal del Duero y diversas fuentes que jalonan sus pueblos, junto a los pozos que servían para lavar en las bodegas subterráneas. “Este año –añade García– queremos afianzar el enoturismo deportivo con la cantidad de pruebas existentes y trabajar de forma conjunta con los adheridos a la Ruta del Vino y actividades como talleres fotográficos, visitas específicas a viñedos, senderismo, visitas guiadas en bicicleta, paseos a caballo, etc.”
Naturalmente, el vino y las bodegas son los principales protagonistas de la Ruta, aunque no los únicos y destaca la familiaridad y trato cercano con el visitante. La mayor parte de los bodegueros han heredado de sus antepasados la cultura del vino y muestran su vida. Esa cercanía y familiaridad lo agradece el visitante, ya que aprende mucho del vino y su cultura. “Nuestro referente son los rosados, frescos y afrutados, deliciosos. Aunque también hacemos unos tintos de calidad que merecen ser probados.”
Y para acompañar al vino, nada mejor que los productos y recetas de la tierra y para ello Castilla y León es el lugar perfecto. Sopa de ajo, lechazo asado, chuletón, patatas a la importancia, morcillas, pan de pueblo… son algunos de los signos de identidad de la región. Dentro de la Ruta hay una variedad de productos del territorio que incitan a disfrutar del enoturismo con productos locales, como son la miel de Valoria la Buena, el queso y cuajadas de Mucientes, el chocolate de Dueñas, las morcillas de Cigales o la repostería de Dueñas… junto a ello la cosmética del vino que tiene como sede a Cigales y que es conocida y respetada a nivel nacional e internacional.
La Ruta del vino Cigales depara muchas sorpresas y no solo por descubrir sus vinos rosados y tintos, sus decenas de bodegas subterráneas, sus pueblos y villas encantadores, sus castillos, su naturaleza, su artesanía, su gastronomía… También por vivir sensaciones únicas que raramente se encuentran en otros lugares. Un buen ejemplo es el propuesto por la Posada Real Hospedería Concejo, que en sí misma ya es una sorpresa al descubrir un proyecto de envergadura y mucha calidad en el pueblito de Valoria la Buena. Su programa “Sibarita week-end enoturismo”, válido para cualquier fin de semana, incluye todo lo necesario para disfrutar de una escapada perfecta: Dos noches de alojamiento en suite con desayuno a la carta, detalle de bienvenida, el primer día (viernes) cena para dos en el Salón de los Relojes de su restaurante El Sueño de General, con un menú maridado con cinco platos y tres vinos y el sábado, cata y visita comentada para dos probando tres vinos de la bodega, cena en la sala de catas o Salón de los Relojes con menú gastronómico con seis extraordinarios platos. El último día (domingo) visita al conjunto de las históricas bodegas de Valoria La Buena. En algún momento del largo fin de semana se puede disfrutar de la experiencia de Apiturismo, por la mañana, visitando los colmenares, cubiertos con el traje protector para ver las abejas de cerca y cata de tres mieles de Montes de Valvení con dos vinos de Concejo bodegas. El precio del paquete para dos es de 485 euros.