Por mar llegas a Mykonos, considerada «la perla del Egeo», con su pueblo blanco, sus callejuelas, sus formidables molinos, tiendas y sus hermosas playas. Prácticamente te encontrarás con una iglesia por manzana, todas ellas pequeñitas y muy decoradas en su interior, con arañas de cristal, como es la tradición de la Iglesia Ortodoxa.
Santorini es sin lugar a dudas la isla más panorámica. El poblado de Thira, construido en la cima de la montaña y frente al acantilado de origen volcánico (la Caldera), ofrece las mejores vistas del Egeo. Las puestas de sol, perderse en las callejuelas y descubrir pequeñas iglesias, tiendas, restaurantes y pequeños bares con terrazas sobre el Egeo, es sin duda el deleite de muchos viajeros.
Rhodas es una de las islas más atractivas, cultural y paisajísticamente hablando. Por su exclusiva ubicación frente a las costas turcas, fue bastión de muchas civilizaciones que lucharon por reconquistar, desde allí, otros
territorios en Medio Oriente. Entre las ruinas mas antiguas se encuentra un teatro y un estadio griego, un barrio musulmán, con mezquitas, un barrio medieval de los Cruzados, donde resaltan los blasones de las diferentes órdenes de caballeros con el castillo, declarado Partrimonio de la humanidad, y el barrio griego de casas blancas con sus puertas y ventanas pintadas de colores diferentes.
En la entrada al Puerto de Rhodas, se emplazaba el famoso «Coloso de Rhodas», hoy desaparecido y substituido por dos cievos, que son el símbolo de la isla. La bahía de Lindos, coronada por su Acrópolis y a pocos kilómetros del centro de Rodas, es de una belleza sin igual. Por la noche la movida está en el barrio moderno, donde abundan los restaurantes y boliches.