Si por alguna razón nos encontramos en territorio de Argelia, debemos saber que uno de los principales sitios turísticos que este país puede poner a nuestra disposición es, justamente, el de los campos de refugiados de la provincia nacional de Tinduf, sitio que recibe a miles de visitantes a lo largo del año, por las complejas estructuras que allí se han formado a lo largo de los tiempos.
En este sentido, se debe destacar que estos establecimientos, ubicados en la provincia previamente mencionada, han sido habilitados para ser ocupados por refugiados saharauis, siendo que incluso, en la mayoría de los casos, llevan las mismas denominaciones que varias ciudades de la región, como por ejemplo El Aaiún, Auserd, Smara y Dajla.
Atendiento a los apartados técnicos que se recogen en estos casos, los especialistas sostienen que cada uno de los campamentos que se han levantado en el lugar corresponde a una denominada “wilaya”, espacios en los cuales, a su vez, se establecen conformaciones de núcleos societarios más pequeños, los que reciben el nombre de “dahiras”, y que muchas veces alcanzan poblaciones de hasta 10 mil habitantes.
Hay que destacar, de la misma forma, que entre los habitantes de este sitio, si bien hay muchos que llegaron directamente desde su tierra natal, hace cerca de tres décadas al mismo, otros ya son nietos de refugiados, que en realidad nunca llegaron a conocer su patria, por lo que la mezcla de culturas se encuentra muy presente entre sus pasillos internos.
Además, es realmente impactante comprobar las condiciones casi infrahumanas en las que viven muchas de las personas en estos espacios, ya que no cuentan con agua corriente ni luz, y sólo les mantiene vivos, en muchos casos, la ayuda internacional que reciben mediante iniciativas como el Programa Mundial de Alimentos, que buscan evitar la inmigración de estas personas a otros países europeos.