Murano, la isla más famosa de Venecia por su cristal

Venecia es una de las ciudades más conocidas, y visitadas, de Italia. Se trata de un lugar único construido sobre muchas islas pequeñas, y que están conectadas entre sí mediante puente. Pero entre todas esas islas, hay una que destaca sobre el resto, y que está algo más alejada de la ciudad. Se trata de la Isla de Murano, conocida como la hermana pequeña de Venecia, y que es conocida en todo el mundo por su cristal.

A lo largo de nuestra publicación de hoy, hablaremos sobre esta isla, así como algunos de los rincones que debes visitar si decides conocerla.

Un poco de historia sobre Murano y su cristal

Antes de hablar sobre qué visitar en Murano, hablemos un poco de su historia, ya que esta isla se encontraba casi deshabitada hace algo más de 800 años. Fue a finales del siglo XIII cuando se trasladó allí toda la industria del cristal con el objetivo de reducir el riesgo de incendios en Venecia. No hay que olvidar que para trabajar el cristal es necesario alcanzar temperaturas muy elevadas, lo que resultaba muy peligroso para la estructuras de las casas de la ciudad.

Desde ese momento, la isla de Murano es conocida en todo el mundo por la calidad de su cristal. Hoy en día, en sus calles existen muchas personas que se dedican a trabajar el cristal, diseñando vidrios artísticos que adquieren un gran valor.

Qué visitar en Murano

Visitar Murano es obligatorio si viajas a Venecia. Además su pequeña separación, la distancia entre una y otra son apenas dos kilómetros, hace que se pueda visitar subido en un Vaporetto. Pero, ¿qué lugares, imprescindibles de conocer, se esconden en Murano?

La Catedral de Murano

Se trata de una bellísima basílica que se remonta al siglo VII, aunque su estructura actual corresponde a finales del siglo XII. Esta catedral fue levantada en honor a Santa Maria y San Donato, y en su interior se puede contemplar algunas piezas de gran valor como un mosaico del siglo XIII, un pavimento de vidrio del año 1140 o una pintura de Paolo Veneziano.

En su exterior destaca su impresionante columnata que la convierte en un lugar mágico.

El Museo del Vidrio de Murano

Como ciudad famosa por su vidrio, no podía faltar un Museo dedicado a este material. Este museo está ubicado en el antiguo Palazzo dei Vescovi di Torcello, un edificio de estilo gótico, y que fue fundado para superar una de las mayores crisis que ha sufrido este sector.

Su interior está formado por 9 salas de exposición, con una colección permanente de obras donde se puede contemplar el talento de los artesanos. Hoy en día, este museo se sigue enriqueciendo continuamente mediante la compra de obras, así como la donación que hacen los maestros del vidrio.

Las Iglesias de Murano

Además de la catedral de Santa Maria y San Donato, en Murano podemos visitar otras dos iglesias de gran belleza. Se trata de la Iglesia de Santa María de los Ángeles, en el Gran Canal. La otra iglesia está dedicada a San Pedro Mártir, reconstruida en 1551 y dedicada al apóstol Pedro.

Hay que decir, que en su tiempo, Murano llegó a contar con hasta 18 iglesias, conventos y monasterios, pero que cuando Napoleón llegó a la isla solo quedaron la catedral y estas dos que hemos comentado.

El Faro de la Isla de Murano

Se trata de un faro que está construido en mármol blanco de Istria y que alcanza los 34 metros de altura. Este se encuentra en a posición más exterior de la isla, frente a la laguna. El faro es una de las paradas de los vaporetto en la isla.

Museo de Arte Contemporáneo Berengo

Se trata de un museo donde poder contemplar las obras de la colección del propio Adriano Berengo, así como diferentes exposiciones itinerantes.

Pero a todo lo comentado, para disfrutar de la belleza de la isla de Murano, nada como dar un paseo por sus calles y empaparse de su magia.

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