Visitar la ciudad de Turín implica acercarse a la Sábana Santa, una de las reliquias más importantes del mundo cristiano. Sin embargo una reciente investigación indica que este tesoro de la religión cristiana podría ser en realidad falso, con una datación equívoca ocasionada por un terremoto.
En el año 33 un terremoto en Jerusalén habría causado una radiación de neutrones que fue la responsable de un error en la datación por carbono de la Sábana Santa de Turín, llevada a cabo por especialistas en 1988.
La historia de la Sábana Santa
La teoría sostiene que un terremoto en la vieja ciudad de Jerusalén sería el causante de la famosa imagen de la Sábana Santa. Hoy miles de personas se acercan anualmente a la capilla real en la Catedral de San Juan Bautista en Turín, Italia, para conocer esta prenda. Difícilmente cambie en algo esta nueva teoría, sin embargo en los últimos días los arqueólogos y antropologos han vuelto a mencionar el tema.
El equipo de investigadores liderado por Alberto Carpinteri llevó a cabo nuevas pruebas químicas y físicas para demostrar que las ondas de presión de alta frecuencia originadas en la corteza terrestre por los neutrones en el terremoto habrían creado la falsa imagen de un hombre que se cree era Jesús.
La presencia de esta nueva teoría no parece haber afectado a los creyentes que siguen visitando la Catedral de Turín como una muestra de devoción hacia Jesús. Es más, a nivel turístico puede que esta nueva teoría vuelva a despertar el interés por el Sudario y se acerquen aún más personas, ya que más allá de que se confirme o no la procedencia de la Sábana Santa, su atractivo para los creyentes sigue vigente.
¿Cambiaría tus deseos de acercarte a Turín a ver la Sábana Santa si resulta que no perteneció a Jésus? ¿Puede un símbolo seguir siéndolo aún si no se confirma su presencia en la crucifixión?