El sector turístico cada ves se sofistica más en búsqueda de nuevos clientes, y la oferta de atractivos y servicios puede expandirse hasta limites inimaginados, como sucede con estos hoteles que para nada brindan las típicas estructuras de un alojamiento turístico, sino que, en cambio, están considerados como los hoteles más extravagantes de toda Suecia.
Un hotel en la mina
¿Alguna vez leíste la novela “Indias Negras” de Julio Verne”? Pues en esta genial historia gran parte de la narración trascurre en una ciudad subterránea montada en una antigua mina, y tal como sucedió con muchas de las ideas que Verne imaginó para sus trabajos literarios, con el tiempo se han hecho realidad, y el Hotel Sala Silvermine es un claro ejemplo de ello, pues si bien no alcanza las dimensiones de una ciudad, sí proporciona todas las comodidades de un típico alojamiento rustico, con la única diferencia de encontrarse a más de 150 metros bajo la superficie, enclavado en una mina de plata abandonada, que sorprende por su tamaño y estructura geológica.
Este alojamiento se encuentra a 150 kilómetros de la capital sueca, Estocolmo, y aunque pueda resultar extraño, sus costos no son nada fuera de lo normal, ofreciendo a sus huéspedes, además del misterioso alojamiento, algunos tours guiados por la mina, que seguramente aumentarán el encanto de este extravagante hotel, que prácticamente es una atracción turística en sí mismo.
Alojamiento en el hielo
Y si bien en el anterior hotel nos internábamos en las entrañas de la tierra, con el Ice Hotel lo haremos dentro del hielo, pues año tras año, en la aldea sueca de Jukkasjärvi, ubicada en pleno Circulo Polar Ártico, se levanta este hotel construido únicamente con bloques de hielo, pero no por ello deja de presentar una estructura y comodidades para los huéspedes a la altura de los mejores resort del mundo, contando además con servicios de spa y hasta con una iglesia que parece haber salido de las Crónicas de Narnia.
Pero lo que resulta más increíble es que este hotel deba montarse todos los años, para mantenerse por tan solo unos meses, ya que cuando la temperatura aumenta, probablemente nadie quiera hospedarse en sus congeladas habitaciones, a no ser que guste de dormir con un paraguas abierto.
Suecia es un destino maravilloso, con una fascinación por el diseño que se refleja en muchas de las actividades del país, por lo que si quieres disfrutar de unas vacaciones muy originales, alguno de estos hoteles puede servirte a la perfección como base de operaciones para explorar este destino turístico escandinavo.