Ruse es una de las ciudades más bellas de Bulgaria, ubicada justo a un lado del río Danubio. Su población de 180.000 habitantes ha sido desde siempre una de las más ligadas a la actividad industrial y al comercio en el país europeo.
En Ruse se encuentra el puente que une Bulgaria y Rumanía, cruzando de lado a lado estas dos naciones. Esta frontera le ha permitido a la ciudad crecer ya que ha sido puerta de entrada para turistas y bienes de todo tipo a lo largo de la historia.
La Torre de la Transmisión
Uno de los grandes atractivos turísticos de Ruse es la Torre de la Transmisión. En la parte superior hay un restaurante donde se puede comer y sacar excelentes fotos. La belleza de la ciudad de Ruse y también la posibilidad de ver Rumanía al otro lado del río Dúnav hacen de esta torre una de las visitas imperdibles de la localidad.
También están las ruinas de los tracos en Isperij, a unos pocos kilómetros. Se trata de un atractivo turístico arqueológico muy importante donde se pueden ver rastros de los primeros habitantes de Bulgaria, anteriores incluso a los búlgaros y los eslavos.
Si eres partidario del turismo gastronómico no puedes perder la oportunidad de probar la katma, un platillo relleno con miel y nueces, verdaderas delicias de la gastronomía búlgara. Luego, y mientras comemos este dulce, vamos al cañón de Lom en el Parque Nacional Rúsenki Lom. Un espacio natural sorprendente con más de 600 especies de aves, ciervos y otra fauna.
Terminamos el día en el Lago Lipnik, rodeados de árboles y toda la belleza natural de Bulgaria, un país que invita a los viajeros a sorprenderse con la magia y la historia por partes iguales, además de la belleza natural que no se detiene.