Se le conoce a Ekaterimburgo en Rusia, como la Capital de los Urales, porque precisamente pertenece al Distrito Federal de los Urales y del Oblast de Sverdlovsk, Rusia. Una ciudad en la Rusia central a orillas de la cordillera de los Urales es una ciudad poblada, que lo mismo nos resulta moderna que tradicional, pero hay que decirlo no destaca especialmente por su arquitectura como otras ciudades de Rusia y la vieja Europa.
Considerada Ekaterimburgo Rusia una ciudad de gran relevancia para Rusia y la región, porque es una importante sede de orden industrial, cultural y educativa. A ella se llega fácilmente a través de conexiones que te acerquen al Aeropuerto Internacional de Ekaterimburgo-Koltsovo aunque también haces el viaje emocionante y siempre cautivante del famoso ferrocarril Transiberiano.
Su casco histórico deja entrever algunas construcciones de antaño y permite hacer un recorrido por la plaza de la ciudad en donde hacer compras o visitar alguno de los pocos pubs que ofrecen comida autóctona algo que nadie quiere perderse al visitar Ekaterimburgo Rusia, que podríamos llamar también la ciudad del tiramisú por ser este postre, un plato especial en esta región de Rusia.
Una ciudad industrializada que vio su entorno modernizarse y su vida modificarse, precisamente por ese espíritu netamente industrial que la distingue. Entre sus monumentos más destacables se encuentra la llamada Iglesia sobre la Sangre en Ekaterimburgo Rusia, dedicada a la dinastia de los Romanov es un complejo de dos iglesias, un anexo patriarcal, un campanario y un museo, erigidos en el lugar donde se encontraba la casa Ipátiev propiedad de un comerciante ruso y en donde en julio de 1918 los bolcheviques asesinaron a los Zares de Rusia, todos sus hijos y servidumbre. El paisaje es especial, la ciudad se encuentra a orillas del río Iset desde donde se ven los rascacielos y también los paisajes de una Rusia, que siempre despierta curiosidad.
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