Conocida como “la Florencia del Elba”, la ciudad alemana de Dresde –gema arquitectónica recién descubierta por los turistas- podría perder su estatus como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. El problema surgió por la construcción de un puente con cuatro carriles justo en el centro de lo que fue designado sitio histórico, y que habrá de conectar la urbe con el valle del río Elba, famoso por sus castillos barrocos y jardines lujosos.
“Si los planes de la construcción de dicho puente fueran cambiados por un proyecto que respetara el valor del paisaje “cultural”, dice la declaración oficial de la Unesco”, el lugar podría permanecer en la lista de Patrimonio de la Humanidad”. Esta institución colocó a la ciudad alemana a su lista de patrimonios en peligro en junio del 2006. Dresde podría convertirse en el segundo sitio que pierde el estatus de Patrimonio de la Humanidad.
En respuesta a la preocupación de la Unesco por el proyecto del puente, que fue aprobado por los locales a través de un referéndum en 2005, las autoridades de la ciudad reestructuraron en enero del año 2008 que lo llamaron un “plan disminuido”, que plantea la reducción del puente a solamente un metro de ancho. Hace poco la Unesco mandó a un equipo internacional de expertos en conversación para estudiar el caso y recomendaron la construcción de un túnel en vez del puente.
Los ciudadanos que se oponen a este proyecto insisten en que aun la construcción del túnel es innecesaria. Un grupo de ambientalistas ha señalado que el tráfico en Dresde ha disminuido.