Dubai es un milagro en el desierto, está considerada como la joya de la arquitectura modera, donde cada semana se inauguran nuevos edificios y a cual más impactante. Se puede recorrer las islas artificiales ganadas al mar donde ya se están construyendo barrios lujosos, y donde, en una de ellas, se encuentra el hotel más lujoso de nuestros tiempos, el Burj Al Arab, de siete estrellas. En sus instalaciones se destaca una cancha de tenis en el último piso del gigantesco hotel, además de un hall panorámico que va desde la planta baja, hasta lo más alto del mismo.
Estar en Dubai es como estar viviendo en el futuro. Todo es nuevo, todo fue construido hace muy poco. Autopistas ultra modernas, grandes urbes con edificios impactantes por su estilo, diseñados por los mejores arquitectos a nivel mundial. Pero dentro de todas las cosas sorprendentes, nada como encontrarnos con un centro de esquí en pleno desierto. Un centro de esquí con nieve natural, en la cual llama la atención ver esquiadores con turbantes, lo cual no es lo mas común ver en una pista de esquí. También impacta ver el contraste entre la gran urbe y el desierto mismo.
Una hermosa costa sobre el Mar de Arabia, donde aguas cristalinas nos permiten no sólo tomar baños, sino practicar deportes náuticos como buceo o realizar paseos en barcos con fondo de vidrio, para apreciar la vida marina. Si hablamos de compras, podrás elegir lo que quieras, puesto que la ciudad es un gran centro de compras con modernos Shopping y malls, donde se puede encontrar casi todo y de todas partes del mundo.
Dubai es esto y mucho más. Pero es un destino para el cual precisaras un bolsillo grande y bien lleno.