Curacao, para disfrutar de sus playas hermosas y bucear en el sur del Caribe.
Es la isla más grande de las Pequeñas Antillas, que también incluyen Donaire, St. Maarten, Saba y St. Eustatius. Se encuentra a 1931 kilómetros al sur de Miami y a 56 al norte de la costa de Venezuela. Las opciones para el viajero contemporáneo son muchas y muy ricas.
Puedes empezar con la congregación más antigua de judíos en las Américas, la Sinagoga Mikvé Israel-Emanuel, un elegante edificio amarillo limón en el bonito centro de Willemstad. Mira al suelo, lo cubre una gruesa capa de arena, símbolo del éxodo de los israelitas desde Egipto. Cruza el patio para entrar en el Museo Cultural e Histórico Judío, una antigua residencia de rabinos donde encontrarás documentación detallada de la historia de los judíos sefardíes en Curacao.
El centro histórico de Willemstad merece una visita relajada, es la capital de las Pequeñas Antillas (o Antillas Holandesas) y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997. Hileras de casas color pastel y tejas de barro que parecen salidas de un cuento de hadas de Hans Christian Andersen se alinean en el área central de Handelskade.
Contrata a un guía profesional en la oficina de turismo a las afueras de Willemstad, en Pietermaai 19, para que te ayude a encontrar el camino por la ciudad. Ya en la oficina, pide una guía de museos, donde encontrarás información detallada sobre 14 instituciones de la isla, incluyendo el Museo Kura Hulanda, con su escalofriante exhibición sobre el comercio de esclavos. Vale la pena recorrerlo con calma.
Después querrás pasar un buen rato en un Jeep Safari amarillo 4×4, para atravesar los acantilados de piedra caliza de la isla y sus desiertos azotados por el clima. Pájaros wara wara con duros picos patrullan planicies relucientes de sol, donde crecen árboles divi-divi con sus ramas y troncos retorcidos .
Para limpiarte la arena de la isla, nada mejor que una nadada refrescante en la cala de Blue Bay, para luego dirigirse al Jaanchie’s, un bar restaurante relajado en Westpunt, favorito de los locales desde hace más de 70 años. Haz lugar en tu estómago para degustar los mariscos locales. O para la iguana en curry amarillo. Dicen que sabe a pollo.
Para más información: www.curacao.com