El avance de la vacunación a nivel mundial, parece que nos está dando una tregua ante la pandemia causada por la Covid-19. Todo a punta a que las cosas irán mejor según pasen las semanas, cosa que ha sido bien recibida por las personas que tienen ganas de viajar. Los destinos de todo el mundo trabajan para ofrecer la máxima seguridad a sus visitantes. Un ejemplo lo encontramos en Egipto, un país que cada año recibía millones de personas y que quiere volver poco a poco a la normalidad ofreciendo un turismo seguro.
Hace un año, el sector turístico egipcio implementó estrictas medidas de seguridad e higiene, recogidas en el Plan para la Reanudación del Turismo que puso en marcha el Ministerio de Turismo y Antigüedades en coordinación con el Ministerio de Aviación Civil, el Ministerio de Salud y Población, y la Federación de Turismo de Egipto. La rigurosa aplicación y control de las medidas incluidas en este Plan, alineadas con las directrices de la Organización Mundial de la Salud, permitieron al país abrir paulatinamente sus fronteras a los visitantes y comenzar a recibir turistas internacionales a partir del 1 de julio de 2020.
Con el aval del sello “Safe Travels”, otorgado por el World Travel & Tourism Council (WTTC), Egipto ha trabajado desde entonces para reposicionar a nivel internacional el destino, recuperarla actividad turística y volver a la senda de crecimiento anterior a la pandemia.
En 2019, Egipto recibió 13,6 millones de turistas internacionales, un 21% más que el año anterior, aproximándose a la cifra récord de 13.000 millones de dólares en ingresos turísticos. Las previsiones para 2020 apuntaban a alcanzar los 15 millones de turistas, estimaciones más que razonables teniendo en cuenta que en los dos primeros meses de ese año ya había recibido 2,3 millones de turistas. La irrupción de la pandemia truncó todas las expectativas y aplazó acontecimientos como la esperada apertura del Gran Museo Egipcio.
La tarea de Ahmed Youssef, Presidente de la Autoridad Egipcia de Turismo, y de Magued Abou Sedera, Subsecretario de Estado de Turismo, -quienes encabezan la delegación egipcia en FITUR- será afianzar las relaciones con los operadores turísticos españoles para restaurar lo antes posible el flujo de viajeros procedentes de España.
Tradicionalmente este mercado se ha mantenido como un emisor estable para Egipto. El perfil del turista español es el de un viajero interesado por la cultura, que se siente cautivado por el extraordinario legado de la milenaria civilización egipcia y que disfruta de la visita a los museos y sitios arqueológicos, así como del descubrimiento de las populosas ciudades del Egipto moderno, como son El Cairo o Alejandría. En los últimos años, los turistas españoles también han comenzado a frecuentar los destinos del mar Rojo, dotados de una excelente infraestructura hotelera y facilidades para la práctica del buceo en un entorno natural privilegiado.
El amplio stand de Turismo de Egipto en FITUR estará ubicado en el pabellón 6 (stand 6D05). Con un montaje muy visual, llamará la atención de los profesionales y visitantes que acudan a la feria con sus espectaculares imágenes de algunos de los grandes atractivos turísticos del destino. Allí el público podrá informarse también sobre los requisitos de entrada al destino, que desde el 1 de septiembre de 2020, exige a todos los viajeros un test PCR negativo realizado en las 72 horas previas al vuelo.