Uno de los complejos que no podemos dejar de visitar en nuestro viaje a Bélgica es el Jardín Botánico Nacional que se encuentra ubicado en las afueras de Bruselas más exactamente a 12 kilómetros del centro de la ciudad en el histórico Dominio de Bouchot.
Este estupendo espacio de 92 hectáreas dedicado a la naturaleza cuenta con una historia muy particular dado que se trata de un nuevo sitio destinado a esta institución convirtiéndose en uno de los jardines botánicos más grandes del mundo.
Cuando hablamos de su pasado nos referimos con mayor precisión a que este complejo antiguamente, en tiempos de la Revolución Francesa, estaba situado en el centro de Bruselas y luego de la Segunda Guerra Mundial fue trasladado hasta su emplazamiento actual.
Dentro de sus instalaciones tendremos la oportunidad de realizar un más que interesante recorrido por la vegetación originaria de todos los puntos del globo, además de un herbario que dispone de más de 3 millones de plantas disecadas, una completa biblioteca especializada, una granja y construcciones que tuvieron su origen en el siglo XIX y que ahora funcionan como restaurantes y tiendas.
Otros atractivos imperdibles dentro del Jardín Botánico Nacional son el «Palacio de las Plantas«, los jardines frutales, el bosque de América del Norte y los dos estanques del Chateau y la Orangerie donde se pueden contemplar lotos y plantas de agua.
Vía│Bélgica por descubrir