Quizás se pregunten que tiene de llamativo esta construcción en las afueras de la capital cubana, y la respuesta se encuentra en el nombre de quien fue su propietario: el reconocido escritor norteamericano Ernest Hemingway.
Se trata de una vivienda que dispone de una torre de tres pisos donde Hemingway pasaba gran parte del día ya que en este lugar estaba completamente aislado de los ruidos exteriores y de cualquier distracción, lo que le proporcionaba la tranquilidad necesaria para concentrarse en su trabajo.
Dentro de los datos curiosos que se pueden conocer acerca de la vida de Hemingway en esta estupenda construcción se sabe que en el primer piso disponía de una habitación donde albergaba alrededor de 57 gatos.
Hoy La Vigía recibe un gran número de visitantes que tienen la posibilidad de observar las instalaciones con sus muebles e interesantes objetos ubicados del mismo modo que cuando era habitada por Hemingway y una extensa biblioteca que al igual que las otras pertenencias son consideradas como un patrimonio muy importante del país.