Allí tendremos la oportunidad de admirar uno de los tesoros megalíticos más interesantes del país y quizás del planeta. Se trata de un conjunto de menhires, exactamente 1935 formaciones rocosas, en algunos casos de más de un metro de altura.
Estas particulares, caprichosas y misteriosas formas cuentan con muchos siglos de antigüedad y si bien existen un gran número de leyendas alrededor de ellas, lo cierto es que justo cuando el sol nace y de la misma manera durante el crepúsculo, algunas de ellas se alínean con el Astro Rey.
También hay que señalar que debido al inexorable paso del tiempo algunas se han desgastado por la erosión y aunque no lo crean por las numerosas visitas de turistas que recorren el lugar y desean llevarse un «recuerdo«.