En Barcelona podemos encontrar una amplia variedad de lugares interesantes, pero sin duda uno de los puntos más emblemáticos es La Rambla, famosa por sus atractivos callejeros, este lugar constituye un paseo obligado, ideal para todo público.
Este histórico recorrido se extiende desde la Plaza de Cataluña, el centro de la ciudad y el puerto. En todo horario podemos observar la presencia de artistas, como cantantes, pintores entre otros, quienes brindan a la gente un espectáculo propio de los grandes teatros, además de diversas cafeterías, y restaurantes.
El trayecto se encuentra divido en cinco tramos, entre los que encontramos la Rambla de Canaletas, la Rambla de los Estudios, allí se emplazaba la antigua Universidad, la Rambla de las Flores, único lugar en el siglo XIX donde era posible adquirir flores, y que actualmente está lleno de floristerías, la Rambla de los Capuchinos, denominada así debido al antiguo convento de frailes y donde encontramos el Gran Teatro del Liceo y el reconocido Café de la Ópera, y finalmente la Rambla de Santa Mónica en la entrada del puerto.
La misma magia la podemos encontrar en las calles cercanas, de las cuales una nos conduce hasta la Palza Real, un bellísimo sitio con palmeras donde se suelen reunir los fines de semana muchos coleccionistas de monedas y sellos.
El encanto de esta tradicional zona no puede pasarse por alto, las calles llenas de vida y arte nos invitan a vivir un momento único, que seguro perdurará por siempre en todos aquellos que disfruten cada detalle que esconde esta magnífica área.
Vía Sobreturismo