Las propuestas extravagantes no dejan de aparecer alrededor del mundo y sorprendernos para mostrar en esta oportunidad la posibilidad de tomar un baño durante la helada época invernal de Berlín.
Si bien esto puede sonar algo descabellado, es una actividad que se puede desarrollar en las piscinas flotantes que se encuentran en pleno centro y sin la contaminación que hay en los ríos.
A estos lugares se los conoce como “Badeschiff” y constituyen maravillosos solariums con jacuzzi y cafetería, ubicados en antiguas barcazas que representan un paisaje muy particular para los viajeros que se encuentre en la zona.
La que se ubica en Berlín ha sido transformada en una isla donde uno se puede relajar y apreciar los servicios como sauna y piscina, disfrutando además de una vista encantadora de la ciudad.
Este lugar, creado en el año 2004 por Susanne Lorenz, también ofrece una playa artificial de pequeñas dimensiones con asientos para los turistas y un bar al aire libre siendo un gran éxito desde su inauguración y un destino imperdible.