Lejos de las grandes ciudades que hacen a los circuitos turísticos, siempre es interesante recorrer el interior de cada país para conocer sus tradiciones y atractivos naturales. Hoy nos acercamos a la provincia de Córdoba, en Argentina, para pasear por Agua de Oro, un antiguo poblado a sólo 56 kilómetros de la ciudad capital.
Es una zona muy popular por sus atractivos senderos y recorridos de turismo ecológico así como las rutas de turismo aventura que aprovechan el entorno natural para ofrecernos una escapada diferente a lo largo de las clásicas sierras cordobesas.
La historia del pueblo
Agua de Oro fue fundado el 5 de abril 1896, ese año empezaron las mediciones de la tierra de la Estancia Agua de Oro que fue estipulada por Don José Diáz Rodríguez. La belleza de este pueblo serrano hoy está ubicada a poca distancia de dos grandes monumentos regionales,la Iglesia San Vicente Ferrer y la Capilla de Nuestra Señora del Rosario.
El primero es un templo de mediados del siglo XVIII, mientras que la capilla fue construida en 1730 y tiene una gran impronta jesuítica acompañada por detalles propios de la arquitectura indígena.
Agua de Oro era una de las paradas más importantes para la ruta de postas del Alto Perú, hoy el camino ha sido remodelado y adaptado para ofrecer estupenda vistas panorámicas que invitan a los viajeros a deleitarse con los mejores paisajes del centro provincial.
Agua de Oro es un frondoso balneario natural rodeado de bosques y bañado por el Arroyo San Vicente. La oferta hotelera y gastronómica es muy amplia y abarca desde hoteles de primer nivel hasta hospedajes rurales.
Ideal para viajar en familia o con amigos, un recorrido por Córdoba no puede dejar pasar la oportunidad de conocer Agua de de Oro y sus atractivos templos jesuíticos.