Si este año quieres recodar a Cela te verás obligado a desarrollar un singular ruta que te llevará a los destinos más significativos, ya solamente de su fecunda obra literaria, sino de sus propios recuerdos personales.
Este año se conmemora los cien años del nacimiento del gran escritor gallego. Y que mejor manera para recordar a Cela que celebrarlo que acudiendo a algunos de los destinos más representativos en la vida y obra del Premio Nobel de Literatura. Bien porque vivió durante muchos años, o sencillamente porque en ellos se desarrollaron algunas de sus obras más reconocidas. Y en donde, por supuesto, no puede faltar su Galicia natal, donde reposan sus restos.
Iria Flavia, para recordar a Cela
Si hay alguna parte del territorio nacional donde hay una mayor vinculación con este escritor, esa no es otra que en su villa natal, Iria Flavia. Donde está ubicada la Casa Museo de la Fundación Camilo José Cela, un viejo y elegante caserón del siglo XVIII. Alberga, no solamente una importante biblioteca de casi 50.000 volúmenes, sino también una pinacoteca, sala de exposición, y hasta un paraninfo para los estudiosos de su obra. En este recinto cultural de reciente creación, podéis acceder a sus objetos personales (plumas, manuscritos, anotaciones, etc.), que os ayudará a ampliar los conocimientos sobre el prosista local.
Una vez visitada sus estancias, no podemos por menos que dejar de acudir en la misma localidad a otro museo de similares características. Y que está dedicado a una de las fuentes de inspiración de Cela desde su niñez: Rosalía de Castro. También gallega, también padronesa, pero decantada por la poesía. Con un busto de ella, en pleno centro de la villa, que servirá para que recuerdes su excelsa figura.
Para imitar su gusto por la buena cocina, sería un pecado mortal que no aprovechases algún descanso en esta microruta en el corazón de Galicia, para deleitarte con uno de los platos típicos de la villa coruñesa. Los conocidos como Pimientos de Padrón, ya sabéis, “unos pican y otros non”. Acompañado de ese Ribeiro que tanto le gustaba degustar a este genio de la palabra cada vez que volvía a su lugar de nacimiento.
Tuy y sus recuerdos de la infancia
Sin salir de Galicia, pero sí de provincia, el siguiente punto de encuentro te lleva hasta Tuy (Pontevedra). Crucial en su vida, al residir en esta población gran parte de su familia, especialmente esas tías suyas de la que era su ojito derecho. Cualquiera que haya leído sus libros sabrá de lo que decimos, ya que rara es la obra en donde no se menciona este lugar, aunque sea de pasada.
Y en donde destaca su espléndida catedral románica, exponente artístico de la ciudad. Villa elegante que también se caracteriza por ser limítrofe con Portugal, solamente separada por el Rio Miño, y que tan bien retrato en su obra “Del Miño al Bidasoa”.
La Alcarria y los viajes con mochila
El siguiente destino de vital importancia procede de otro de sus libros de viajes, el inmortal “Viaje a la Alcarria”. En una vasta extensión por la provincia de Guadalajara llegarás a los pequeñitos y austeros pueblecitos (Pastrana, Sacedón, Budia, Durán, hasta llegar finalmente a Brihuega), que fueron objeto de esta ruta cultural que quedó plasmada en tan excepcional libro. Sus callejuelas empedradas y los palacios renacentistas son algunos de los reclamos para visitar esta singular zona rural en cualquier época del año. No en vano, en más de un rincón, encontrarás alguna referencia al autor gallego.
Palma de Mallorca, en plenitud como escritor
Sino queréis tener un viaje incompleto sobre la vida de Camilo José Cela, no tendréis más remedio que cruzar el Mediterráneo hasta llegar a Palma de Mallorca. Aquí desarrollo su vida literaria durante sus años más fructíferos de recreación artística. Creando la revista literaria de los “Papeles de Son Armadans”, y que tan gratos recuerdos traen a los lectores más incondicionales del maestro de la palabra castellana.
Incluso actualmente puedes visitar el barrio donde vivió, y que dio la denominación a esta publicación. Todavía quedan algunas casas de comidas, bares y librerías que fueron requeridas con cierta regularidad durante sus muchos años de estancia en la isla balear. Hasta el punto que los más curiosos de su vida pueden recordar a Cela acudiendo hasta el idílico litoral de Sant Elm, en Andratx, donde compró una pequeña finca forestal, al enamorarse de su paisaje.
Todavía hoy puedas darte un agradable chapuzón en sus cristalinas playas, o incluso acercarte a su coqueto embarcadero. No en vano, están ubicados en uno de los arenales más extensos de Andratx y uno de los principales núcleos turísticos sin masificar.
Después de recorrer los lugares más importantes en su vida, ya solamente quedará para recordar a Cela acercarte hasta uno de los sitios en donde todavía hoy le recuerdan los camareros con más años. El célebre Café Gijón, en el Paseo de Recoletos y a pocos metros de la Biblioteca Nacional, donde en los tiempos actuales siguen acudiendo escritores e intelectuales para discutir sobre lo divino y lo humano. En unos de los establecimientos más emblemáticos de la historia de España.
En cualquiera de los lugares de este itinerario se podrá recordar a Cela. Ahora ya no solamente tendrás que averiguar cuál te ha gustado más, sino por el contrario, el más vinculado a este escritor. ¿Te gustaría precisamente en este año recordarlo? Su centenario será el pretexto perfecto para iniciar este original viaje.