Las ruinas de Machu Picchu forman parte de una de las experiencias más bellas que un viajero puede realizar para conocer Perú y su gran riqueza cultural. Es una zona muy bella que puede ser visitada en cualquier momento del año, pero hay algunas consideraciones a tener en cuenta si planeas hacer un viaje por tu cuenta, sin utilizar los servicios de un operador turístico.
Tanto Machu Picchu como Cusco y el Valle Sagrado pueden visitarse en cualquier época del año, aunque hay ciertas precauciones a tener en cuenta dependiendo del momento del año en que elijamos viajar.
Temporada de lluvias
En Machu Picchu de diciembre a marzo es la época de lluvias. Febrero es el mes con mayor nivel de caída de agua, aunque eso no evita que cientos de personas elijan esta época para ir a conocer los secretos de las ruinas de Machu Picchu.
Las lluvias tienden a ser pasajeras y no duran mucho tiempo, con una campera o un chaleco impermeable es suficiente, aunque hay que remarcar que no es la mejor época para disfrutar del sur de Perú. Esta época también es difícil porque no se puede realizar cómodamente el Camino del Inca, que ya de por sí es difícil, y ni hablar de la belleza de Machu Picchu iluminado por el sol.
El fenómeno de El Niño
Es muy importante no viajar a Perú en años donde el fenómeno de El Niño esté presente. Se trata de un fenómeno meteorológico que sucede cada determinada cantidad de años y provoca fuertes vientos y lluvias que causan todo tipo de destrozos en Perú. Antes de elegir la fecha en la que vas a viajar a Perú, investiga si hay alguna novedad respecto de El Niño. Mejor aún si puedes viajar entre julio y agosto, meses que corresponden a la temporada alta de la región.
