La India es un país verdaderamente increíble para todas las personas que aman el turismo, y uno de los sitios que de forma necesaria debemos visitar si nos encontramos en su territorio, y más concretamente en la capital Nueva Delhi, es la famosa Puerta de la India, que se halla en el llamado «camino de los reyes».
También denominada oficialmente por algunas firmas de turismo como “el Memorial de todas las guerras indias” o “Rajpath”, se trata básicamente de un monumento construido por el arquitecto Edwin Lutyens para homenajear de alguna forma a los soldados indios que perecieron en la Primera Guerra Mundial y las Guerras Afganas de 1919.
Fuera de esto, en cuanto a la historia del monumento debemos decir que la piedra inicial fue puesta el 10 de febrero de 1921 por el Duque de Connaught, una de las principales personalidades locales inmiscuidas en su construcción, y aunque por entonces se pensó que la misma llevaría unos dos o tres años, finalmente fue necesaria una década entera hasta que se le inauguró en 1931.
Entre todos los elementos que rodean la Puerta de la India, en tanto, uno de los más importantes es la denominada “Jawan Jyoti” que significa “llama del guerrero inmortal”, una llama de fuego eterna, que ha sido dedicada oficialmente a todos esos soldados que fallecieron, sumando en este caso a los de la Guerra entre la India y Pakistán, de ese mismo año.
Es común, en este sentido, que muchos de los turistas que viajan a la India, aprovechen este sitio para tomarse fotografías e indicar con ellas el comienzo del viaje, sobre todo por lo imponente del mismo, con sus espectaculares 42 metros de altura, y siendo en la actualidad una de las mayores señas de la arquitectura local que podemos encontrar en cualquier parte del territorio nacional.